Jack Grealish vivió una verdadera montaña rusa en su paso por el Manchester City. Llegó como fichaje récord para los cityzens en 2021, por 100 millones de libras, como el jugador más caro en la historia de la Premier League y termió yéndose por la puerta de atrás, ni siquiera considerado ya en el banquillo de Pep Guardiola.
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Y Grealish sabe que mucho tuvo que ver su actitud para ese fracaso, reconocido por su excéntrica vida extra cancha, su gusto por la bebida, las fiestas y atracción por el glamour.
“La gente dice: ‘Le gusta salir, le gusta la fiesta’, y a mí me gusta. Quiero vivir mi vida y disfrutar, pero obviamente hay un momento y un lugar para hacerlo. A veces, para ser sincero, probablemente no elegí el momento adecuado. En el City, por ejemplo, a veces no me ayudé, lo admito abiertamente, pero no creo que todo se debiera a eso”, dijo Grealish en una entrevista de Sky Sports con Tim Sherwood, su exentrenador en el Aston Villa.
En la charla, Jack aceptó que “tuvo dos buenos años” en el City de los cuatro que vivió y dijo que la “presión” de su costo de transferencia le hizo bastante daño en la primera campaña. Además, aceptó que le costó “acostumbrarse a la forma en que el entrenador quería jugar” y el “ambiente” del cuadro ”skyblue”.
Grealish fue cedido al Everton para la temporada 2025-26, procedente del City y con opción a ser comprado por los “Toffees”. El internacional inglés perdió el aprecio de Pep Guardiola, disputando solo siete partidos de la Premier League la temporada pasada. Y esta campaña ha impresionado en Merseyside, con cuatro asistencias en sus primeros siete partidos.
El delantero inglés aceptó que busca reencontrar su nivel rumbo al Mundial de 2026, para tener un espacio en la selección de Inglaterra y que ha sido en Everton donde ha encontrado el “amor” que necesitaba para ese resurgimiento.
“Sabes, soy bastante vulnerable fuera de la cancha y quería ir a algún lugar para volver a sentir el amor y despertar y jugar con una sonrisa en mi rostro nuevamente”, dijo. Parece que Grealish está de vuelta, con un Everton que ha sorprendido en este arranque de campaña.
